Llego ese momento en el que te deshaces de todo lo malo, donde reutilizas sueños que esperas algún día cumplir.
Llega ese momento en que pones en perspectiva tu vida y ves que tantos errores has cometido, de cuantas veces has tropezado y cuantas te has encariñado con esa piedra que te hace caer.
Te das cuenta de que no puedes llamar amigo a todos los que te rodean, que amigos son los que están en las malas y en las peores... Que los que están de vez en cuando no sirven y que es mejor dejarles marchar.
Notas que necesitas amor, pero solo el que mereces, y si aún no descubres cual es pues no hay que desesperar, llegara cuando menos lo esperes y siempre y cuando estés preparada para amar a alguien más que no seas tu misma, aunque suene egoísta y un poco ególatra, no está mal quererte, quierete mucho, mimate, que si no lo haces tú nadie lo hará.
Buscate, encuentrate, que no te hagan dudar de quien eres y de quien quieres ser, si bien quien fuiste te ha hecho quien eres hoy, recuerda que nunca le podrás dar a todo el mundo en el gusto, así que gustate a ti y que no importe nada más.
Dicen que si deseas las cosas con el corazón la vida te las da, ve y aferrate a ello, lucha, trabaja para conseguirlo, por si la vida se pone cabrona y no quiere dartelo.
Y por sobre todas las cosas se feliz, no dejes que el mundo cambie tu sonrisa, porque tu sonrisa puede cambiar el mundo...
Feliz 2018.
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